¡Después de ocho años! Linkin Park regresó al Perú e hizo vibrar a sus fanáticos con un show cargado de emociones
Después de ocho años de silencio, Linkin Park volvió a Lima para reencontrarse con sus seguidores. La banda estadounidense ofreció un poderoso concierto el 28 de octubre de 2025 en el Estadio de San Marcos, como parte de su gira From Zero World Tour. Fue una noche cargada de energía y nostalgia para los fanáticos.
Un reencuentro lleno de emoción y nostalgia
Desde muy temprano, los alrededores del estadio se convirtieron en punto de encuentro para los seguidores de distintas generaciones. Algunos viajaron desde provincias o incluso desde el extranjero para vivir el retorno de su banda favorita. Las camisetas negras, las banderas con el logo del Hybrid Theory y las pulseras luminosas se mezclaban en un ambiente cargado de expectativa y recuerdos.
La emoción se desbordó cuando las luces se apagaron y Mike Shinoda apareció en el escenario con la fuerza de siempre. El tema "Somewhere I Belong" marcó el inicio de una noche inolvidable. Emily Armstrong, con su estilo propio, logró conectar con el público sin intentar imitar a su antecesor, transmitiendo autenticidad y pasión.
El repertorio combinó clásicos como "New Divide" y "What I've Done" con nuevos temas como "The Emptiness Machine", reflejando la evolución musical de la banda. El momento más emotivo llegó cuando Shinoda bajó del escenario para abrazar a un niño que sostenía un cartel de agradecimiento. Luego, se colocó la bandera del Perú sobre los hombros mientras el estadio entero coreaba "Numb" entre lágrimas.
El legado que sigue vivo en Perú
El vínculo entre Linkin Park y el público peruano se remonta a su primera presentación en Lima, el 11 de mayo de 2017, en el Estadio Nacional. Aquella noche, Chester Bennington prometió volver, sin imaginar que su partida meses después dejaría esa promesa en suspenso. Su muerte marcó a millones de seguidores y pareció poner punto final a una era.
Sin embargo, en abril de 2024, la banda sorprendió al anunciar su regreso con Emily Armstrong como vocalista principal. La decisión no buscaba reemplazar a Chester, sino continuar con el mensaje de resiliencia y unidad que siempre caracterizó a Linkin Park. "Kintsugi", concepto japonés que significa "reparar con oro lo que se rompió", se convirtió en el símbolo de este renacer.
Durante el concierto en Lima, temas como "In the End", "Faint" y "Bleed It Out" sellaron un reencuentro cargado de emoción y gratitud. Para muchos, no fue solo un espectáculo, sino una experiencia sanadora que recordó que la música puede cerrar heridas.
Linkin Park regresó a Lima no para reemplazar, sino para reconstruir. La energía del público, las lágrimas compartidas y la pasión sobre el escenario confirmaron que la banda sigue siendo un referente de esperanza y fortaleza. Aquella promesa que Chester dejó pendiente se cumplió al fin: el corazón de Linkin Park volvió a latir en Perú, y su luz, lejos de apagarse, brilló más fuerte que nunca.