The Devil Wears Prada 2 escenificará una MET Gala, según recientes fotos filtradas
La esperada secuela de The Devil Wears Prada ha comenzado sus grabaciones y ya genera gran revuelo entre los fanáticos de la moda y el cine. Las recientes imágenes del rodaje han revelado que la cinta incluirá una recreación inspirada en la icónica Met Gala, el evento más glamoroso del mundo de la moda.
"The Devil Wears Prada 2" recreará una Met Gala en la gran pantalla
Meryl Streep y Stanley Tucci, en sus recordados papeles de Miranda Priestly y Nigel, fueron vistos con vestuarios espectaculares en un set que imita una alfombra azul cian. La estética, el estilo de las prendas y la puesta en escena sugieren que se trata de una versión cinematográfica del evento organizado cada año por el Museo Metropolitano de Arte de Nueva York.
El Met Gala, creado en 1948, se ha transformado en un escaparate de la alta costura. Con temáticas anuales desde los años setenta y la dirección de Anna Wintour desde 1995, esta gala se ha convertido en un referente cultural que une moda, música, cine y deporte en una sola noche de lujo y extravagancia.
En este contexto, la decisión de incluir una gala inspirada en el Met en The Devil Wears Prada 2 no es fortuita. Es una estrategia narrativa para resaltar el vínculo entre la moda como espectáculo y el poder que ejerce en el mundo del entretenimiento y la alta sociedad.
Además de los protagonistas originales, nuevas figuras se suman al elenco. Entre ellas, Simone Ashley, quien ya ha despertado curiosidad con su enigmático personaje. Vestida de negro y con un estilo gótico elegante, la actriz de Bridgerton marca una nueva era en esta historia donde la moda vuelve a ser la gran protagonista.
¿De qué trató la primera película?
La primera película de The Devil Wears Prada, estrenada en 2006, narra la historia de Andy Sachs, una joven periodista que consigue trabajo como asistente de Miranda Priestly, la temida editora de la revista de moda Runway. A pesar de no tener interés en la moda, Andy busca usar el empleo como trampolín profesional.
En medio de un entorno superficial y exigente, Andy se enfrenta a desafíos personales y laborales que la obligan a replantear sus valores. Su transformación física y emocional muestra el costo de encajar en un mundo dominado por las apariencias, el poder y la ambición.
El personaje de Miranda Priestly, interpretado por Meryl Streep, se convirtió en un ícono cultural por su frialdad, elegancia y autoridad. En la secuela, la inclusión de una gala inspirada en el Met refuerza ese universo donde la moda no es solo vestuario, sino una herramienta de poder e influencia.